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Berenjenas a la parmesana
SALSA DE TOMATE
3 latas de tomate pelado
Ajo
Aceite de oliva
2 cucharaditas de extracto de tomate
Aceto balsámico
Sal a gusto
Azúcar
BERENJENAS
6 o 7 berenjenas
Sal gruesa
Queso parmesano o reggiano
Mozzarella en fetas
4 tomates frescos
Procedimiento:
SALSA DE TOMATE
Pelar el ajo, picar y freír en aceite de oliva.
Cortar los tomates adentro de la lata y echar en la sartén.
Cocinar a fuego lento el mayor tiempo posible para que tome más sabor.
Verter el extracto de tomate en la salsa y revolver, aplastando los tomates, y chequear que no queden pedazos grandes de tomate.
Agregar un chorrito de aceto balsámico, una pisca de azúcar y sal a gusto.
ARMADO
Cortar las berenjenas a lo largo en rodajas de 1 cm, dejarlas reposar en sal gruesa unas horas, y después lavarlas y escurrirlas bien.
Rociar las berenjenas con aceite de oliva y llevar al horno.
Dar vuelta las berenjenas, cuidando que no se cocinen demasiado.
Sacar del horno y cubrir una fuente con las rodajas de berenjenas.
Echar una capa de salsa de tomate y cubrir con una capa de rodajas de tomate natural.
Agregar una capa de mozzarella en fetas.
Repetir el procedimiento hasta que la fuente esté cubierta. Entre capas, ir agregando sal.
Terminar con una capa de trozos de mozzarella.
Cubrir la fuente con papel de aluminio y llevar al horno 1 hora.
Sacar del horno, espolvorear con queso parmesano o reggiano rallado y volver a llevar al horno.
Dejar gratinar hasta que se dore.
Sacar del horno, dejar enfriar unos minutos y servir.
Apenas suelte el olor el ajo, sacar del fuego porque si no se quema.
Si nos quedamos cortos de salsa, aplastar las berenjenas con las manos: tienen que quedar cubiertas de salsa.